El Partido de la Liberación (PL) de Argentina realizó exitosamente su XIV Congreso Nacional el 4 y 5 de enero pasado en Córdoba con delegados de varias provincias. Tras un debate enriquecedor fue aprobado el documento político: “Frente antiimperialista para soluciones de fondo a la crisis del capitalismo dependiente y neocolonial”.
Los delegados expresaron su alegría por la consolidación de la revolución socialista en la Cuba que cumplió 61 años, así como por el fortalecimiento del proceso bolivariano en Venezuela, también enfrentando el bloqueo y las agresiones del imperialismo yanqui. Saludaron las rebeliones populares en Ecuador y particularmente en Chile, como así también en Colombia y Haití, entre otros países de la Patria Grande Latinoamericana.
Nuestros militantes venían de participar activamente en sus provincias de acciones políticas y legales de protesta contra el golpe de Estado en Bolivia, y de dar solidaridad al presidente Evo Morales y a todas las víctimas de la represión de la dictadura de Añez.
También repudiaron el ataque terrorista ordenado por el fascista Donald Trump contra el gobierno de la República Islámica de Irán, que se plasmó en el asesinato del general Qasem Suleimani y otras personas.
El Congreso del PL se congratuló de la derrota política y electoral de Mauricio Macri, y por la apertura de otro ciclo político con el Frente de Todos, al que votó en forma crítica en octubre. Pero que esa derecha haya sido derrotada no significa que la política neoliberal, el FMI y la deuda externa, los monopolios y oligarcas hayan dejado de ser un problema en el país y la región. Siguen siendo el enemigo principal a enfrentar y derrotar. Sólo así los trabajadores y el pueblo argentino tendrán Pan, Techo, Trabajo, Tierra, Democracia y Soberanía, en un país independiente.
El Congreso enfatizó en dos cuestiones del programa partidario. Uno, se reclama al gobierno de Fernández que no pague la deuda ilegítima con el FMI, odiosa y contraída en forma ilegal por Macri y su gobierno de CEOs. Esa deuda es impagable, a no ser que se acepten los condicionamientos del Fondo, de achicar el gasto y la inversión pública, atacar el sistema de jubilaciones, los salarios y convenios laborales, etc.
El otro reclamo tiene que ver con una “herencia” del gobierno anterior: queremos que el presidente envíe una ley de amnistía al Congreso para lograr en forma inmediata la libertad de todos los presos políticos encarcelados por el modelo neoliberal de ajuste, entrega y represión.
Apoyaremos todo lo positivo que haga el nuevo gobierno, pero también nos opondremos junto al pueblo y en la calle a las concesiones a los monopolios y el FMI.
El Congreso eligió, por voto libre y secreto, al órgano colectivo de dirección, el Comité Central, resultando electos camaradas de fuerte compromiso político y social. Un dato no menor, todos ellos trabajadores y trabajadoras (dos de ellos jubilados).
El último punto fue la elección de la Secretaría General del PL, recayendo esta designación, por unanimidad, en la camarada Irina Santesteban, dirigente que tiene una trayectoria de 32 años en la organización, con militancia sindical, feminista, social, territorial y de derechos humanos. El PL es así el primero y por ahora, único partido político popular y de izquierda en Argentina, cuya máxima autoridad es una mujer.
Secretaría de Prensa, 6 de enero de 2020.
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